Ante la proximidad de las próximas fiestas, en las que algunos se empeñan en denominar "celebración del solsticio de invierno", el triunfo de la luz sobre la oscuridad, son muchas las personas a las que les gusta recordar y reflexionar sobre el auténtico y único sentido de la Navidad. Para ello "El Belén que puso Dios" es un libro tierno, que nos devuelve a nuestra infancia y a la vez en su ingenuidad nos acerca a la grandes verdades del hombre:
"Al principio quiso Dios poner un belén, y creó el universo para adornar la cuna.
Primero inventó el tiempo, y lo dividió en meses, en semanas, en días. Los días estaban formados por millones de años, que son como instantes para Dios.
Y empezó su trabajo.Hizo el cielo, y lo llenó de estrellas y de pájaros.Hizo la luz, y luego el sol (así lo cuenta la Biblia, aunque parezca raro), y encendió una lámpara blanca en la noche para que se viera bien la cara de Jesús; no fuesen a equivocarse los ángeles de la Nochebuena"Un regalo magnífico para disfrutar leyendo en estas fechas.